La Maestría en Biología de la Unidad Iztapalapa habilita recursos humanos de alto nivel

MÉXICO, 20 de abril 2023, UAM

En tiempos de cambio climático, de incremento del nivel del mar, alteración de los ecosistemas y pérdida de biodiversidad, entre otros problemas, la formación de un mayor número de biólogos es fundamental para México, señaló el maestro Francisco Gutiérrez Mendieta, coordinador de la Maestría en Biología de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
 
Forjar recursos humanos de alto nivel en el estudio y saber de los hábitats, capacitados para desarrollar actividades académicas, productivas y de servicio, asociadas al diagnóstico, inventario y manejo de los bienes bióticos, fue el objetivo central de la creación de este posgrado que se imparte en la Unidad Iztapalapa de la Casa abierta al tiempo y que recientemente cumplió 21 años.
 
En entrevista, el maestro Gutiérrez Mendieta expuso que la apertura de éste respondió también a que en aquella época no existían opciones suficientes para las personas egresadas de la Licenciatura en Biología de la misma sede que deseaban continuar sus carreras, quienes muchas veces “veían cerrado el camino”.
 
Las únicas alternativas eran la Universidad Nacional Autónoma de México y sus institutos de Ciencias del Mar y de Ecología, por lo que la comisión encargada de evaluar la posibilidad de instituir el posgrado consideró que era importante hacerlo en la Ciudad de México e incluir a graduados de otras entidades del centro del país, entre ellas Puebla, Tlaxcala y el Estado de México.
 
Por lo tanto, surge con el fin de formar alumnado que contribuya al análisis de los ambientes y capacitados para desempeñarse en algunas instituciones vinculadas a la investigación, organizaciones no gubernamentales, consultorías de diagnóstico de alimentación y manejo de recursos biológicos del país, así como en la aplicación del conocimiento para que las comunidades hagan un uso más adecuado de ellos.
 
Muchos tesistas han laborado en algunas comunidades rurales, en las que ayudan a los pobladores a entender cuáles son los bienes con los que cuentan y cómo pueden hacer una mejor conservación de su entorno.
 
No basta saber que México es un país megadiverso, sino asumir que este hecho implica un compromiso, en el sentido de saber “cómo vamos a conservar esa biodiversidad que tenemos” y para ello falta preparar a más biólogos que atiendan esta necesidad.
 
La formación idónea previa para cursar el posgrado son las licenciaturas en Biología, Hidrobiología, Biología Marina, Biología Ambiental, Ecología, Veterinaria, así como especialidades afines en conservación y manejo de patrimonios naturales.
 
El profesor del Departamento de Hidrobiología afirmó que uno de los rasgos que distinguen esta Maestría de la UAM es que en el primer año ofrece a los estudiantes una capacitación sobre aspectos ecológicos, evolutivos y estadísticos, mientras que en el segundo empiezan a desarrollar su tesis de maestría para obtener el grado.
 
“Este programa educativo es pertinente respecto de los requerimientos de la biología en todo el país” y eso “nos hace estar satisfechos de la eficiencia y de los resultados de la maestría” en términos de la incorporación de los egresados al mercado de trabajo, comentó.
 
Las cinco líneas de investigación que se siguen son Sistemática, Taxonomía y Filogenia que tiene como propósito ubicar y clasificar a los organismos de acuerdo con los estándares internacionales referentes al asiento de las especies y sus nexos evolutivos, lo cual contribuye a apoyar inventarios de la flora y fauna.
 
La de Anatomía y Fisiología difunde conocimiento sobre la estructura, anatomía y fisiología de los organismos con el fin de entender cómo se relacionan con el ambiente que los rodea, así como los procesos evolutivos que han favorecido la clasificación de la estructura y fisiología de las variedades.
 
La tercera, de Florística, Faunística y Biogeografía desarrolla saber nuevo sobre las comunidades animales y vegetales, participando en la concepción de inventarios sobre la biota y aportando al discernimiento de las innovaciones originadas por el hombre o el ambiente, incluido el cambio climático global.
 
Ecología de Poblaciones y Comunidades, por su parte, abona a la utilización de los ecosistemas terrestres y acuáticos, produciendo además información para su aprovechamiento sostenible.
 
Por último, la línea de Evaluación de Recursos Bióticos Acuáticos y Terrestres instruye sobre el manejo, apropiación y explotación de los acervos naturales, tanto acuáticos como terrestres, con una visión de desarrollo sustentable, lo cual es indispensable para alcanzar un avance económico y social armónico con el entorno y la permanencia de los hábitats para las futuras generaciones.
 
El maestro Gutiérrez Mendieta subrayó que de acuerdo con las entrevistas sobre el grado de satisfacción del posgrado del que han egresado 223 personas, entre 70 y 75 por ciento menciona que la preparación que recibieron fue adecuada para desempeñarse en el ámbito laboral, lo que “nos indica que estamos siendo eficientes en cuanto al desarrollo individual y profesional de los estudiantes.
 
La Maestría en Biología está inscrita en el Padrón Nacional de Posgrados de Calidad del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología desde que fue creada y en las últimas cuatro evaluaciones (desde hace más de 12 años) ha quedado en la categoría de posgrados consolidados, que es la más alta que tiene dicha institución.
 
El logro más significativo del programa es “la eficiencia que hemos conseguido en la formación de recursos humanos, que el alumnado se sienta complacido con su educación, así como constatar su inserción en el mercado de trabajo o en actividades de investigación”.

Fuente: UAM