Profesores investigadores de la UAM opinan en torno al Día del Maestro

MÉXICO, 13 de mayo 2024, UAM

“Son tiempos difíciles para ejercer la profesión de profesor, sobre todo para aquellos que pensamos que enseñar no sólo consiste en entregar saberes objetivos e información, sino también en profesar en lo que se cree, en los valores y las convicciones que uno tiene, involucrando a las y los estudiantes en su propio proceso de formación crítica”, consideró el doctor Felipe Victoriano Serrano, docente de la Unidad Cuajimalpa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Sin duda los rasgos generales que definen esta dificultad son “los cambios abruptos de los medios y soportes de transmisión del conocimiento y las nuevas formas de valorización que éste ha adquirido en el capitalismo contemporáneo, todas ellas transformaciones inéditas que han trastornado la institución universitaria de modo profundo y en muy poco tiempo, alterando con ello los contenidos de la enseñanza, las relaciones en el aula y las formas de apropiación del saber”, puntualizó.

Todo ello ha obligado a procesos de adaptación acelerados, a la vez de estimular formas innovadoras de resistencia, sostuvo el investigador del Departamento de Ciencias de la Comunicación, quien dijo sentirse privilegiado de impartir clases desde hace casi 20 años en una casa de estudios que le ha permitido el ejercicio libre de la profesión, con un modelo centrado en la experiencia educativa y en los pasos destinados a provocarla.

En el marco de la celebración del Día del Maestro, el miércoles 15 de mayo, el doctor Saúl Alcántara Onofre sostuvo que la enseñanza es una de las profesiones más ceñidas que hay, “como en mi área que es Arquitectura del Paisaje y la restauración de monumentos, para formar profesionistas de alto nivel que cuando egresen ejerzan la profesión en estas disciplinas fundamentales para evitar el cambio climático”.

El integrante de la Junta Directiva de la Casa abierta al tiempo destacó la importancia de formar expertos en estas áreas para salvar el planeta, “empezando por la Ciudad de México, ya que las metrópolis se están convirtiendo en desiertos, por el cemento, el asfalto y la impermeabilización en todo el suelo, lo que agrede a la vegetación endémica, por lo que ya hay poco senderismo en el país”.

Así, en este campo “hemos generado recursos humanos de altísimo nivel que han creado mucha literatura, y gracias a esta profesión en la Metropolitana he obtenido reconocimientos importantes como la Medalla al Mérito en Artes el año pasado, además de ser pioneros en la Arquitectura del Paisaje en este país, a través de la primera especialización, la primera maestría y el único doctorado en América Latina”, precisó el investigador de la Unidad Azcapotzalco.

Para la doctora Aleida Azamar Alonso, ser profesora en esta época “es asumir un rol activo en la formación de futuras generaciones no sólo como profesionales competentes, sino como seres humanos que manifiesten una profunda comprensión y capacidad empática con su realidad”.

De igual forma, implica un compromiso constante con la adaptación y la innovación, “ya que vivimos en un mundo que se caracteriza por los cambios rápidos y las nuevas tecnologías, así que nuestro papel como educadores trasciende la mera transmisión de conocimiento, porque a la vez que enseñamos a navegar en la complejidad de nuestro entorno, también debemos ir captando nuevas cosas”.

La docente del Departamento de Producción Económica de la sede Xochimilco expresó que ha tenido la fortuna de experimentar y contribuir en este proceso educativo durante los últimos 19 años, lo que le ha permitido entender que la docencia moderna exige una visión integradora que abarque no sólo la academia, sino las realidades socioeconómicas y culturales de las y los alumnos.

“Ser maestro es ofrecer a cada uno de los estudiantes experiencias con la única finalidad de proporcionarles una nueva expectativa, una nueva forma de pensar para generar una conciencia de madurez; en pocas palabras es alguien que acompaña al alumno a crecer por sí solo”, mencionó el doctor Víctor Eduardo Quiroz Velázquez, jefe del Departamento de Procesos Productivos del campus Lerma.

Se trata de “una nueva oportunidad para poder transmitir a los chicos un poco de lo que la vida me ha permitido asimilar y eso es la satisfacción más grande que he experimentado desde el año 2016, cuando llegué a esta Institución a impartir unidades de enseñanza aprendizaje como sistemas de potencia fluida, sistemas neumáticos y laboratorio de integración de sistemas mecatrónicos, entre otras”.

La doctora Claudia Rojas Serna comentó que aun cuando ser maestro actualmente sigue siendo un reto, porque además de la enseñanza académica se debe tener en cuenta temas como la inclusión de género, lo que distingue serlo en la Casa abierta al tiempo es el entusiasmo de los alumnos por cultivarse.

“Mi experiencia en la Institución ha sido muy buena; siempre cuando doy un nuevo curso hay caras diferentes, pero lo que persiste es la disposición por aprender, al menos en la Licenciatura de Ingeniería Hidrológica de Iztapalapa, donde imparto las materias de Hidráulica de superficie libre, Hidráulica de conductos a presión, Simulación de proceso del agua superficial y Simulación hidráulica”, concluyó.

Fuente: UAM